Esta receta es original de Manoli Bautista, tía de mi mujer, si bien con ciertas (pocas) modificaciones que, como siempre quedan abiertas al gusto de cada cual.
Si bien originalmente se planteó para hacerlo con solomillo de cerdo, necesitaba de unos periodos de cocción algo más prolongados por lo que se pasó a utilizar solomillos marinados y congelados (qué sería de nosotros sin Mercadona para cosas como esta, jeje), con lo que el tiempo de cocción se reduce considerablemente, ganando además en sabor. También he probado a hacerlo con un trozo de carne de cabezada cortado en cuatro trozos a lo largo para que el grosor sea menor, pero sigue saliendo dura, de manera que, como he de seguir haciendo experimentos al respecto, solo lo presento con los solomillos marinados, que son apuesta segura.
Este plato que os presento aquí puede servir muy bien tanto para un segundo al medio día como para una cena informal, o incluso para unos aperitivos si se acompañase con una mermelada de pimiento en unas tostas, por ejemplo. Todo queda a la imaginación.
- 2 solomillos marinados
- hierbas provenzales
- tomillo
- clavo molido
- pimienta
- orégano
- 2 hojas de laurel
- 1,5 pastillas de caldo
- 2 litros de aceite de girasol
- 1 cabeza de ajos
- Descongelar los solomillos en la nevera desde la noche anterior.
- Sacar de los envoltorios y secar con papel de cocina, hacer dos trozos más o menos iguales cada uno y reservar.
- En un mortero, echar las pastillas de caldo y 6 u 8 granos de pimienta negra y machacarlo todo. Volcarlo a una bandeja de cocina amplia.
- En el mortero añadir 1,5 cucharada sopera de hierbas provezales, 1/2 cucharadita de postre de clavo molido, 1 cucharada sopera de tomillo y una cucharadita de postre de orégano. Machacar todo bien y volcar a la bandeja de cocina.
- mezclar bien todo el contenido de la bandeja de cocina y repartir de forma homogenea.
- Rebozar los solomillos bien secos en la mezcla de especias con las pastillas de caldo y colocar en el fondo de una olla amplia. añadir la cabeza de ajos limpia y las dos hojas de laurel. Cubrir con aceite de girasol.
- Colocar a fuego fuerte hasta que comience a hervir, bajar a fuego medio y dehçjar cocinar durante 25 minutos.
- Pasado el tiempo, sacar un trozo y comprobar si está hecho por dentro, de ser así, retirar del fuego y dejar enfriar. Caso contrario, dejar cinco minutos más.